Uno de los resultados de mi participación en el movimiento de radios comunitarias es que he acumulado un gran grupo de amistades con productores y locutores y locutoras de radio en varias partes del país. No pude conocer a todos quienes estuvieron en el Encuentro pero reafirmé unas amistades y si, conocí unos otros. Ahora me toca ir a visitar a varias de estas radios; por un lado, para la investigación (para tener un base de comparición), y por el otro lado, para ver a mis nuevos amigos y amigas.
Había un gran contingente de la radio Doble Via, de San Mateo, Quetzaltenango -- como 3 kilómetros fuera de la ciudad de Xela en la carretera que va para San Marcos. Yo conocí unos de ellos hace un tiempo, y conocí más en el Encuentro. Y decidí a buscar como visitar.
Bueno, casualmente, tuvimos que ir a Xela para recoger unos equipos para la radio. No sabía exactamente que cosa (o cosas) era, pero ofrecí por varias razones. Uno, me gustó Xela y sería chévere visitar otra vez, aunque sea muy breve. También, sería una justificación a llevar una de mis compañeras de la radio a ver la radio en Xela. En mis esfuerzas de asesorar el proyecto de radio Ixmukané, me pareció que las compañeras pudieran ganar mucho si tenían algunas experiencias con otras radios -- sobretodo radios que cuentan con menos recursos. También, parte de mi agenda es integrar Radio Ixmukané mas en el movimiento de radios comunitarias. Yo sugerí eso en una reunión que tuvimos hace una semana, pero fue rechazado. Me dijeron que no existieron los recursos económicos, y también había una actitud de que ya el tiempo de asesorar y observar ha pasado; hacemos la radio por hacerlo. Entonces, esto sería la manera de al menos visitar una radio sin gastar recursos (porque el viaje para recoger los equipos fue presupuestado -- parece que las organizaciones en Guatemala viven bajo la tiranía del presupuesto).
El viaje pasó más rápidamente que la otra vez que manejé. Solamente que salimos más tarde porque el cheque y el papeleo para la compra no estaba listo el jueves y entonces tuvimos que pasar por la oficina en Chichicastenango en el camino. Jeanet, mi compañera de la radio, fue conmigo y entonces ella subió a la oficina mientras yo quedé en el carro.
No solamente el viaje pasó más rápido, pero la entrada a la ciudad fue más fácil y realmente lleguemos al sitio sin problemas. Pero las cosas que necesitábamos no eran listas todavía. Fuimos a almorzar, volvimos y no había nadie en la tienda y entonces fuimos a la radio. Encontremos con unos compañeros allí -- unos conocidos de mi participación en el Encuentro, otros nuevos. Impresionante porque la radio es mayormente dirigido por jóvenes, hombres y mujeres -- aunque ese día solamente vimos compañeros y no compañeras). Particularmente impresionante fue la participación de un muchacho de 10 años. La radio pertenece a todos y todas!!!
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